30.4.09

En 199...y algo

Mil novecientos noventa y algo… yo iba en la primaria y escuchaba algo de Guns n’ Roses y Queen… era fan de Los Caifanes y jugaba con tazos… ya no recuerdo cómo, pero un día descubrí Los Caballeros del Zodiaco…

Seguramente fue una de tantas veces que vagaba por mi programa favorito de los sábados por las mañanas… CARITELE…

(este video es de la etapa cuando el Carisaurio no hablaba...)

Bueno, era algo religioso, llegar a la habitación de mis padres y despertarlos para poder ver la tele… mi padre ya alucinaba esta música…


Así es, ese era el intro de la serie... en ese entonces a mi me interesaba poco que la serie fuera de Masami Kurumada, es más no tenía idea que pertenecía a un género primordialmente dirigido a hombres adolescentes… y mucho menos sabía que era adaptación de algo que se llamaba manga, que era como un cómic y se leía de atrás para adelante… lo reconozco… era una completa ignorante…

Simplemente me llamaban la atención los dibujos, las peleas, las historias y sobretodo la mitología… lejos estaba yo de imaginarme a donde me llevaría ese gusto por Los Caballeros del Zodiaco… yo era feliz viéndolos y jugando con mi NES… ah, que tiempos aquellos…

Dentro de mi ignorancia contaba yo con el conocimiento de que estaba dividida en sagas… la Saga del Santuario, que aquí en la tele la trajeron por partes, exactamente tres bloques… era odioso cuando la repetían, pero valía la pena recordar los capítulos… para ese entonces empezaban a circular las estampas de Los Caballeros afuera de la escuela y todos teníamos las nuestras… y ahorrábamos ansiosos de poder conseguir uno de los juguetes de Bandai... sobre todo el del signo zodiacal de uno... yo nunka pude conseguir el mio...



Para cuando empezó la Saga de Asgard, mi padre ya se había habituado, era el único en la casa que no era fan de la caricatura… pero bien que se burlaba cada que aparecía Shiryu para salvar a Seiya… esta saga es mi preferida, pues desde pequeña la mitología nórdica me llamaba mucho la atención y como buen ratón de biblioteca que soy, investigué mucho sobre esa mitología en particular… y como mi perro, un pastor Setherland que llegó a mi casa milenios antes que los Caballeros del Zodiaco, se llamaba Odín, en ese capítulo en que Seiya gritaba: “¡Odín! ¡Odín, que no me escuchas!,” el pobre perro entraba corriendo cada que lo veía… porque como buena freak (que ya lo era, sin saberlo), grababa mi serie favorita en VHS…



La tercera saga era la de Poseidón, y como ya dije antes, yo ni por enterada de que Asgard y Poseidón era parte del mismo libro… algo curioso sucedía cuando pasaron la Saga de Poseidón, donde nos narraban que el malvado Poseidón estaba provocando lluvias e inundaciones… parecía ser verdad… por esas épocas llovía a cántaros en todo el mundo y cada que derrotaban a alguno de los Generales, la lluvia cesaba en ese lugar del mundo… llámenme loca, pero así era…



Ah... lo sé, siempre es la misma historia, pero uno no podía dejar de verla nunca…

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